martes, 30 de septiembre de 2025

Despedida del Caribe

De las siete especies de tortugas marinas que existen en el mundo, cinco pueden desovar en las costas panameñas. Tuvimos la fortuna de ver el nacimiento y llegada al mar de esta tortuga laúd (Dermochelys coriacea). Un momento muy emocionante.

La tortuguita se despidió con lluvia en esta playa. Remato la entrada con algunas fotos de las especies que crecen por la playa y sus alrededores, que completarían la serie dedicada a las especies de las cuencas de los ríos Changuinola y San San (y del Caribe).

Matorrales de icaco (Chrysobalanus icaco).


Flores y fruto de Chrysobalanus icacoChrysobalanaceae.


Varronia curassavica, Boraginaceae

Dalbergia ecastaphyllum, Fabaceae

Epidendrum nocturnum, Orchidaceae

Miconia schlimii, Melastomataceae

Buena suerte a la tortuguita: si fuese hembra y dentro de veintitantos años volviese a desovar a esta misma playa, alguno de mis descendientes podría estar esperándola. El ciclo sigue. Nada se mantiene, todo cambia o se desmorona y desaparece. Aunque en el fondo da exactamente igual, pues nada tiene sentido ni importa, salvo el amor a los hijos, el afán de seguir aprendiendo (y disfrutando) de la naturaleza y algunas creaciones del ser humano (o como se resume acertadamente en la frase -de mínimos- tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro. O un blog).




martes, 23 de septiembre de 2025

Manatí del Caribe (Trichechus manatus)

En el humedal San San Pond Sak vive la más importante población de manatíes antillanos o del Caribe (Trichechus manatus) de Panamá. Hay posibilidad de verlos y hasta allí nos acercamos.

Antigua jaula submarina para capturar manatíes vivos por el Instituto Smithsonian. La población de manatíes en esta parte del humedal sufre importantes oscilaciones a lo largo del año, con un mínimo en diciembre y un máximo (de treinta y tantos animales) en mayo.

Nos adentramos en el río San San hasta un observatorio en alto.

El observatorio se encuentra construido en un manglar de mangle rojo. Las hojas del mangle también forman parte de la dieta de los manatíes, que consumen hasta 60 especies de plantas distintas (entre hierbas marinas, hojas de los árboles del manglar, algas y otras plantas ribereñas).

Los manatíes son atraídos con hojas de platanera y parece que la idea funciona, pues aquí llega el primero. Pueden medir más de tres metros y superar los 600 kg y consumen entre el 4-15% de su peso corporal de material vegetal fresco al día.

El agua está muy turbia y se pone a llover con ganas, pero algunos se dejan ver sacando la cabeza fuera del agua en busca de las hojas de platanera.

En esta serie de fotografías se aprecia el movimiento y funcionamiento de los labios prensiles y flexibles del manatí, que emplea para agarrar y manipular los vegetales que forman parte de su dieta. Recuerdan remotamente a la trompa de los elefantes, con quienes comparten un lejano ancestro.

Para cubrir sus elevadas necesidades energéticas estos sirénidos dedican entre 4 y 8 horas diarias a comer.

Última secuencia de la alimentación del manatí. Un gran día, pues se trata una especie que desde siempre quise ver.


martes, 16 de septiembre de 2025

Bosques inundables del Caribe (2/2)


Más imágenes de los bosques pantanosos.

Guarea grandifolia, Meliaceae

Hippomane mancinella, Euphorbiaceae

Hymenocallis littoralisAmaryllidaceae

Inga spectabilis, Fabaceae

Laguncularia racemosa, Combretaceae

Luehea seemannii, Malvaceae

Morinda citrifolia, Rubiaceae

Moringa oleifera, Moringaceae

Pentaclethra macroloba, Fabaceae

Cativo (Prioria copaifera, Fabaceae).

Sangrillo (Pterocarpus officinalis, Fabaceae), muy extendido por todas las zonas que se inundan periódicamente.


Troncos de sangrillos.

Hojas del sangrillo.

En las zonas de transición entre las formaciones de cativo y las de sangrillo aparece la palma Raphia taedigera, conocida como palma de yolillo.

Raphia taedigera, Arecaceae

Rhabdadenia biflora, Apocynaceae

Spondias purpurea, Anacardiaceae

Tabebuia heterophylla, Bignoniaceae

Tillandsia usneoides, Bromeliaceae

Zygia longifolia, Fabaceae

Legumbres de Zygia longifolia.


martes, 9 de septiembre de 2025

Bosques inundables del Caribe (1/2)

Vamos a rematar las entradas dedicadas a las selvas del Caribe con los bosques inundables, unas formaciones que se encuentran al norte del país, próximas a la frontera con Costa Rica, en la confluencia de los ríos Changuinola y San San. Ambos ríos están conectados por una serie de canales y lagunas y desembocan en el Caribe. La cercanía del mar provoca que el influjo de las mareas se note en estos bosques riparios, con los consiguientes intercambios de nutrientes y movimientos de restos vegetales y otros materiales de desecho.

Estamos en una planicie costera muy húmeda, afectada por lluvias que superan los 2.000 mm anuales, corrientes de agua dulce e influjo mareal, por lo que el terreno se caracteriza por estar parcial o completamente inundado a lo largo del año.

Las comunidades vegetales pantanosas se distribuyen en función de la naturaleza del agua (salobre o no), la cantidad de sedimentos que lleve ésta, la altura de la capa freática y el tiempo que dure la inundación.

Las especies que forman las comunidades más importantes son el cativo (Prioria copaifera), orey (Campnosperma panamensis), sangrillo (Pterocarpus officinalis) y cerillo (Symphonia globulifera). En la parte inundada viven helechos y pastos herbáceos.

En algunas zonas de aguas salobres los manglares hacen acto de presencia, con el extendido mangle rojo (Rhizophora mangle).

En primera línea varios helechos Acrostichum aureum.

Acrostichum aureumPteridaceae

Allamanda catharticaApocynaceae


Annona glabra, Annonaceae

Bignonia aequinoctialis, Bignoniaceae

Bignonia binata, Bignoniaceae

Casearia arguta, Salicaceae

Casearia sylvestris, Salicaceae

Cedrela odorata, Meliaceae


Cocos nucifera, Arecaceae

Cupania cinerea, Sapindaceae

Benteveo (Pitangus sulphuratus).

Iguana verde (Iguana iguana).

Cormorán neotropical (Nannopterum brasilianum).

Erythrina fusca, Fabaceae

Gliricidia sepium, Fabaceae