martes, 26 de mayo de 2020

Ruta de las icnitas (Soria-La Rioja)

Recupero algunas fotografías de plantas realizadas en la denominada ruta de las icnitas, entre Soria y La Rioja, un paisaje dominado por matorrales medios y bajos, lastonares y restos de bosques de ribera y pinares, asentados sobre calizas y otras rocas sedimentarias. Principios de agosto.

Algunas repoblaciones forestales acompañan a la rala vegetación.

Espinares y tarbosaurio.

Espino de tintes (Rhamnus infectoria).

Icnitas de carnívoro.

Hippocrepis commutata


Atractylis humilis

Erucastrum nasturtiifolium


Arriba, la réplica de una especie de braquiosaurio; debajo, huellas de un ornitópodo.

Bupleurum fruticescens

Cephalaria leucantha en plena floración.

Rastro de saurópodo.

Espirea o palilla (Spiraea hypericifolia subsp. obovata).

En la cuenca del río Cidacos, en La Rioja, entre esplegares y romerales, fotografiamos a Cheirolophus intybaceus, un arbusto más típico de los matorrales costeros levantinos.


Detalle de la inflorescencia y vista completa de Sideritis pungens (o S. linearifolia).

Echinops ritro

Antirrhinum litigiosum

La esparceta (Onobrychis viciifolia).

Una libélula moribunda en sus hojas.

Dipsacus fullonum


La "planta del curry" (Helichrysum italicum), vista general y detalle de las inflorescencias.


Porte y rama florida de Senecio inaequidens.

Leucanthemum vulgare

Ononis minutissima

Dianthus carthusianorum

En una zona de huertos abandonados este nogal sigue a lo suyo.

Chopera de Populus nigra junto a matorrales con Genista scorpius, Cistus laurifolius, etc.

El cornejo con frutos (Cornus sanguinea).

Serbal común (Sorbus domestica).

Frutos del serbal.

Huella de dinosaurio terópodo.

martes, 19 de mayo de 2020

Flores (y hojas) de los álamos

En marzo se inició la floración de las diferentes especies de álamos en buena parte del país, así que ahora (en mayo) ya se están dispersando sus frutos. Vamos a mostrar las características más relevantes de sus inflorescencias y hojas para poder distinguirlos entre sí. Comenzamos por el más extendido y conocido, el álamo blanco.

Inflorescencia femenina de álamo blanco (Populus alba). Las flores se adelantan algo a la salida de las hojas, agrupándose en amentos colgantes. Cada flor va acompañada por una pequeña escama.

Las escamas son alargadas, estrechamente ovadas, de color marrón pálido, con el margen aparentemente entero (realmente está finamente dentado) y ápice con largos cilios: en esta muestra las flores ya están algo secas y la escama un tanto arrugada...

...mientras que en esta foto se aprecia mejor el margen ciliado y aspecto general de las escamas frescas.

Las escamas se caen con el tiempo, de manera que no siempre se encuentran. Este ejemplar ha empezado a emitir las primeras hojas, de las que se aprecia el envés blanco, muy tomentoso, y la forma predominantemente ovada, con el margen sinuado-lobado (elevada variedad de tipos y cultivares con diferentes formas de hojas en esta especie). Los peciolos son cortos, tomentosos y sin comprimir.

Vista de las hojas en verano, ya completamente desarrolladas, en los brotes largos: son palmatilobadas (algunas recuerdan a las de los arces), glabras por el haz mientras que el denso tomento blanco persiste por el envés.

Populus alba en marzo, antes de sacar las hojas.

El álamo temblón (Populus tremula) también comienza a florecer en marzo y antes de la foliación. Las inflorescencias son más compactas que en la especie anterior, y debido a la presencia de escamas cubiertas de cilios que acompañan a las flores, presentan este aspecto (recuerdan a una oruga peluda). 

Detalle de las flores femeninas con sus escamas en el álamo temblón. 

En esta especie las escamas son de color marrón oscuro y el margen es laciniado con largos pelos blancos. 

Hojas adultas de Populus tremula. Son glabras por ambas caras y más o menos redondeadas. Sus peciolos son glabros, largos, esbeltos y fuertemente comprimidos lateralmente.

Álamo temblón.

La tercera especie es el álamo cano (Populus canescens), del que ya escribimos hace tiempo sobre su posible origen hibridógeno entre las dos especies anteriores. También saca las flores antes que las hojas.

Las escamas de Populus canescens son de color pardusco, flabeladas (con forma de abanico), de igual longitud que anchura, con el borde cubierto de dientes de distinto tamaño y largos cilios blancos.  

Tronco y hojas de álamo cano en abril.

Vista de otro ejemplar, más joven que el anterior.

Hojas de un brote largo en abril. Tienen forma ovada, son glabras y de color verde oscuro por el haz, con el margen con pocos dientes, irregulares, en ocasiones algo lobadas.

Vistas del envés de las hojas: de aspecto grisáceo, con algo de pilosidad que tiende a desaparecer con el tiempo (aunque no completamente), volviéndose glabrescentes. Los peciolos son similares a los de P. tremula (largos, glabros y comprimidos).

Debido a la presencia de este peciolo, el movimiento de las hojas del álamo cano recuerda a las del temblón cuando hace viento:



Una excelente descripción de los tres álamos (y otras especies chopos y sauces) puede encontrarse en un pequeño libro muy recomendable: Willows and Poplars of Great Britain and Ireland.