martes, 31 de diciembre de 2013

Despedida de 2013

Acabamos 2013, como no podía ser de otra manera y después de un mes cuasi-monográfico dedicado a los frutos de las especies autóctonas, con la foto de uno de los arbustos más típicos de los matorrales termófilos de buena parte de España, con los frutos ya maduros en el mes de diciembre: el mirto. De esta especie no he recogido muestras, así que no hay foto de las semillas.

Que 2014 nos sea propicio a todos: feliz año.


lunes, 30 de diciembre de 2013

El Valle del Lozoya en invierno: de Pinilla a Alameda



Vamos al Valle de Lozoya para acabar el año: es uno de nuestros sitios preferidos y este año lo hemos visitado bastante (aunque luego no haya aparecido en el blog). Aprovechamos el domingo para recorrer los alrededores del río Lozoya, desde Pinilla hasta Alameda del Valle, entre los 1.000-1.100 m de altitud.


Saucedas y otros bosques de galería acompañando al Lozoya.

Espectaculares mimbreras (Salix fragilis) a lo largo del camino.

Un gran ejemplar de Populus nigra.

En toda la zona abundan los tremedales y pequeños humedales.

Una de las especies asociadas a los humedales: Lysimachia vulgaris, de la que solamente queda la parte aérea con los frutos abiertos.

En medio de la ruta aparece este carrizal: la verdad es que no nos lo esperábamos por aquí...

... acompañando a fresnedas y otras especies montanas caducifolias.



Además de la fresneda, las formaciones vegetales típicas de la zona están constituidas por (de arriba a abajo) melojares, setos vivos y praderías.

En los setos, un ejemplar de Viburnum lantana que todavía no ha perdido todas las hojas (un caso raro a estas alturas del año).


Frutos de Viburnum opulus.


Más frutos de los arbustos de los setos, en este caso del bonetero (Euonymus europaeus). Curiosamente, el color rosa de la cápsula que guarda las semillas se ha desteñido y ahora luce casi blanco.

Frutos del aligustre (Ligustrum vulgare).

Más frutos carnosos: los del majuelo (Crataegus monogyna).


Las cumbres del Parque Nacional nevadas.

El ganado aprovecha los pastos de la zona. En este caso, formaciones de arbustos espinosos que sustituyen a los fresnos en las zonas bajas del Valle.

Rosa canina

Más ganado, en primer término una vaca con pinta de Morucha. Melojares (Quercus pyrenaica) al fondo.

Aunque casi todas las rocas de la zona son silíceas, algunos bloques de caliza asoman por el Valle. En las calizas vive esta joya: el geranio del Paular (Erodium paularense), una pequeña matita cuyas hojas presentan este aspecto a finales de diciembre.

Porte de Erodium paularense (alguna gineta ha usado de cagarrutero a a este endemismo).

Aprovechamos hasta que el sol se va; terminamos donde empezamos, con el río y sus saucedas alrededor.

domingo, 29 de diciembre de 2013

En flor al acabar el año: Thymelaea lanuginosa





Un arbustillo, Thymelaea lanuginosa, fotografiado en flor después de una mañana lluviosa en la costa de Casares (Málaga), un 29 de diciembre.




Se trata de una especie que normalmente florece en primavera, habitante de suelos arenosos o que forma parte del sotobosque de alcornocales. En España se encuentra en buena parte de Andalucía y Extremadura; también en Marruecos.





sábado, 28 de diciembre de 2013

Frutos y semillas del rusco

Desde el otoño hasta principios del invierno podremos encontrar los frutos maduros del rusco (Ruscus aculeatus). Se trata de una mata de gustos umbrófilos que encontraremos en diversos tipos de bosques (sobre todo encinares y otras formaciones de hoja perenne) desde el nivel del mar hasta los 1.400 m de altitud. Cuando presenta los frutos maduros, el contraste de éstos con el verde brillante de sus cladodios (tallos adaptados que parecen ser las hojas), lo convierten en una especie muy decorativa.

Frutos de rusco. Son bayas globosas de 10-15 mm de diámetro que suelen contener de una a dos semillas (a veces más). Son muy venenosos.

Semillas de Ruscus aculeatus tras eliminar la pulpa. Algunas tienen forma semiesférica. Para que germinen, hay que combinar la estratificación en caliente durante uno o dos meses con una posterior estratificación en frío.

Aspecto del fruto en una ramilla de rusco.

viernes, 27 de diciembre de 2013

Flores y "frutos" de la sabina de Cartagena (Tetraclinis articulata)

En otoño coinciden (parcialmente) la floración y la fructificación en una cupresácea del sureste ibérico: el araar, ciprés o sabina de Cartagena, aunque muchas veces se prefiere el nombre científico para referirse a ella: Tetraclinis articulata
 


Ramillas de Tetraclinis articulata con gálbulos (azulados y pruinosos) y flores masculinas en octubre. La mayoría de las piñas se encuentran, de momento, cerradas.
 
Detalle de las anteriores flores y las hojas.

Piñas maduras (algunas se están abriendo). Están formadas por cuatro escamas, iguales dos a dos.

Una foto para el recuerdo: la primera Tetraclinis que vi en la Sierra de Cartagena, en verano (de 1993). En esta época del año ya se pueden distinguir los frutos en el exterior de las ramillas.

Detalle de las piñas abiertas y las semillas: los gálbulos recogidos en octubre, se han abierto completamente en diciembre, liberando a las semillas. Éstas son aladas, como muestran las imágenes.

Detalle de las semillas. Parece ser que las semillas de Tetraclinis germinan bien sin necesidad de tratamientos (a priori es lo que cabría esperar de una especie propia de hábitats áridos que crece en zonas sin apenas suelo); no obstante, dicha capacidad germinativa dura solamente unos meses, transcurridos los cuales se pierde debido al enranciamiento de sus aceites.


jueves, 26 de diciembre de 2013

Los frutos del sauzgatillo (Vitex agnus-castus)



Ya habíamos visto la floración de los sauzgatillos y ahora tocaba fotografiar sus frutos. La especie florece en verano y en octubre ya encontramos frutos, aunque no completamente maduros.

Infrutescencias y hojas de Vitex agnus-castus. Los frutos son esféricos y de pequeño tamaño. Al madurar se oscurecen. Al recolectarlos liberan un olor picante muy característico.

Detalle de los frutos, que mantienen el cáliz. También conviene estratificarlos en frío para mejorar los porcentajes de germinación.

Aspecto general y porte de Vitex agnus-castus en otoño, antes de la maduración completa de los frutos y de la caída de las hojas.

miércoles, 25 de diciembre de 2013

La fructificación del espino amarillo (Hippophae rhamnoides)



 
Ya habíamos presentado al espino amarillo, un arbusto alto y espinoso que en España solamente podemos encontrar en el Valle de Tena (pirineo oscense), en zonas de avenida y de sedimentación fluvial. Su espectacular fructificación y el ser uno de los arbustos autóctonos más raros del norte de nuestro país le hace merecedor de una segunda entrada (bueno, y que ahora tengo mejores fotos de los frutos que antes).
 

Frutos de Hippophae rhamnoides, con su llamativo color anaranjado y forma redondeada, que los hacen inconfundibles. A diferencia de otras especies, la recolección de sus frutos puede alargarse en el tiempo, pues permanecen desde finales de verano hasta marzo en la planta.

Hemos recogido frutos del espino amarillo: la recolección es un incordio, pues se trata de una especie muy espinosa con la que hay que tener cuidado para no dañarse. Junto a los frutos, puede apreciarse una espina típica de este arbusto.

Y si la recolección tiene sus riesgos, el despulpado es directamente una pesadilla, pues cuesta mucho liberar a las semillas de la carne del fruto; además están cubiertas por una fina capa que las separa de la pulpa que cuesta mucho eliminar. Cada fruto cuenta con una única semilla. Aunque es una especie que germina bien sin tratamientos, también se recomienda la estratificación en frío durante tres meses.


martes, 24 de diciembre de 2013

El acirón (Acer opalus)

Una de nuestras especies autóctonas de arces, el acirón (Acer opalus), propio del cuadrante noreste del país, fotografiado a finales de octubre. Aparece en bosques mixtos, setos, cañones calizos, etc., en la media montaña.

También el acirón fructifica en otoño. Se suelen separar las poblaciones de las Cordilleras Béticas como Acer granatense. Los senos de las hojas de Acer opalus no profundizan mucho en el limbo (presenta una hoja más compacta, con los lóbulos menos marcados) y es una planta menos vellosa que A. granatense.

Los frutos de los arces, como es sabido, están constituidos por una sámara doble que, en esta especie, forman un ángulo (más o menos) recto.

Detalle de la hoja, con cinco lóbulos poco marcados. Presentan vellosidad por el envés, pero solamente alrededor de los nervios. En Acer granatense son en general más vellosas, así como sus pecíolos.

Frutos recolectados. También se recomienda la estratificación en frío para esta especie, aunque la bibliografía indica que es un género con altas tasas de germinación aun sin tratamientos y sembrando en otoño.