Adenocarpus gibbsianus, una leguminosa arbustiva que vive exclusivamente en Doñana (Huelva) y alrededores. A diferencia de las especies ibéricas del género que viven en la montaña, este codeso empieza a florecer en el mes de abril.
Porte de A. gibbsianus: algunos ejemplares pueden alcanzar los tres metros de acuerdo con Flora Iberica. |
La especie forma parte del sotobosque de pinares y alcornocales que viven próximos al litoral. |
Población de Adenocarpus gibbsianus creciendo entre un pinar; el sustrato sobre el que vive son arenales (dunas estabilizadas próximas a la costa). |
Detalle de las primeras flores, aun sin abrir, en las que destaca el cáliz, glabrescente y glanduloso. |
Ramas con inflorescencias. |
Detalle de las hojas. Tienen un tono apagado por estar cubiertas de pelos crespos. |
Otra vista de las hojas. También las ramillas están cubiertas por la misma clase de pilosidad. |
Aprovechamos para presentar a otras especies arbustivas de los arenales de la costa suroeste, en este caso la cistácea Halimium halimifolium. |
Detalle de las flores de Halimium halimifolium. |
Un tojo (Ulex australis). |
Cistus libanotis, otra especie que solamente podemos encontrar en el suroeste. |
Helianthemum hirtum |
Stauracanthus genistoides |
Flores y primeras legumbres de Stauracanthus genistoides. |
Más leguminosas arbustivas en flor: en esta ocasión el escobón Cytisus grandiflorus. |
Primer herpeto del año (en el blog): la lagartija Podarcis carbonelli. |
Pinares de Doñana al atardecer. |