Al superar los 500 m de altitud empezamos a encontrar algunos árboles como este tilo de hoja pequeña (Tilia cordata). |
Estamos en una zona de sustrato calizo en la que los bosques mediterráneos dominan las exposiciones de solana; aquí tenemos al madroño (Arbutus unedo), uno de sus componentes más genuinos. |
Acer pseudoplatanus |
Picris hieracioides |
Crepis lampsanoides |
Orégano (Origanum vulgare). |
Hypericum androsaemum |
Antirrhinum braun-blanquetii |
Aegonychon (Buglossoides) purpurocaeruleum |
Aquí encontramos a la primera Genista legionensis. |
Ramas espinosas y hojas simples (de haz glabro) de este arbustillo ramoso. |
La especie florece a partir de junio (a veces antes) pero ya no quedan flores: solamente encontramos algún fruto recién formado. |
Ejemplar de Genista legionensis creciendo en un paredón calizo, casi vertical. Esta especie apenas alcanza los 30 cm de altura. |
Encinares cantábricos en las ubicaciones más térmicas. |
Otro acompañante de las encinas, Phillyrea latifolia. |
Aliso (Alnus glutinosa). |
Hojas y fruto de Agrimonia eupatoria. |
Hojas del olmo de montaña (Ulmus glabra). |
El mostajo Sorbus torminalis acompaña a tilos, olmos y otras especies formando parte del bosque de ribera. |
Sauce. |
Fresno (Fraxinus excelsior). |
Una de las trepadoras que ascienden por los huecos del bosque, el lúpulo (Humulus lupulus). |
El eupatorio (Eupatorium cannabinum) en plena floración es visitado por varias especies de mariposas a la vez. |
Entre las diurnas destaca la nacarada (Argynnis paphia). |
Y entre las polillas (aunque también diurna, en este caso), Euplagia quadripunctaria. |
También el yezgo (Sambucus ebulus) en flor atrae insectos. |
La siguiente parada para fotografiar a la aulaga de León será en el corazón de Picos de Europa. |
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